día 4

"El santo del día a día: ora, lucha y confía"

 

DIEGO ERNESTO

 

 

Fragmentos del Ideario MIES, cap.6, pag. 78,79,81 y 82.

►¡Lucharé! El caminito no me priva de la lucha; me empuja, me obliga a luchar. Pero al ser consciente de mi nada y debilidad no me extraño, ni me desanimo, ni me entristezco por mis caídas, sino que me sirvo de ellas para CONFIAR solo en Ti, Dios mío, y en tu MISERICORDIA, para conmigo. Tu, al verme pequeño y confiado en ti, me darás tus propias virtudes y tus méritos, cuando y como tu quieras.

►Jesus, tu te contentas con que tengamos deseos de amarte; con nuestra buena voluntad y sana intención;( ….) te conformas con "deseos de tener buenos deseos". Ya los deseos, SI SON SINCEROS, son OBRAS para ti.

►Este "el caminito" está lejos del quietismo (….) Teresita "empuña la espada" para luchar contra todos los defectos que ve en ella y en sus novicias. No transige con ningún defecto; y no deja de luchar, aunque no vea fruto alguno, pues es conscientemente alegre de su debilidad. Pero sabe que el Padre quiere que luche y ¡lucha! Sin mirar si consigue fruto o no. A ella le toca luchar; luchar incansablemente y si se cansa y deja de luchar algún día, tampoco se extraña de ello. Y así siempre, amando esta vida de CAER Y LEVANTARSE.

Esto es esencial en el caminito. Que no lo olvide Señor, ¡ la lucha! o al menos INTENTAR LUCHAR. Intentar luchar todos los días, a todas las horas, contra todos los vicios y defectos, para conseguir todas las virtudes.

► Teresita lee en el evangelio : "De modo que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino aquel que hace crecer" (1ª COR, 3,7)

A mi me toca solamente LUCHAR, SEMBRAR REGAR, pero el fruto lo dejo en tus manos Señor. Tu lo cogerás cuando quieras y no tienes que enseñármelo para que yo lo vea.

► Teresita se vuelve loca de alegría : sabe que todo lo conseguirá con la Oración.

► Aquí tenemos el fundamento del "caminito": LA PEQUEÑEZ, LA LUCHA, LA CONFIANZA, LA ORACIÓN

► Teresita confía en Dios, en él se abandona, en él nada teme, se llena de gozo con la confianza en el Padre.

 

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